Las bicicletas son para el verano |
Ahora que ya somos un Tour más mayores, una vez
más el ecuador del verano llega con los Campos Elíseos. Y el recuerdo de otro
Tour queda anclado, al mismo tiempo que comienza a desintegrarse entre las
brumas de nuestro cerebro. Ni la plaga del dopaje puede en su totalidad con
nuestro sofá y disfrute.
Márqueting deportivo |
Y como mi vida atlética
solo transcurre, que no es poco, lo único interesante que tengo que
contarles son mis lecturas deportivas,
favorecidas por la falta de TV.
Recomendable al 100% y más en tiempos del Tour, regalo
perfecto para cualquier aficionado al ciclismo, es, sin dudarlo, Mañana salimos,
un cuadro del ciclismo de los años cincuenta magistralmente escrito por Jean
Bobet, hermano y coequipier del primer tricampeón del Tour, Louison Bobet.
Además del valor añadido de la licenciatura en Literatura inglesa de Jean,
observamos en sus múltiples anécdotas y hazañas lo poco que ha cambiado la
épica y la miseria. Del dopaje a la figura del manager, de los amaños a los
fisios. Leer el capítulo dedicado al Mont Ventoux el mismo día que se celebra
la etapa ya es de sibaritas.
Loving vintage |
Otro volumen que llevaba demasiado tiempo en mi
estantería es De qué hablo cuando hablo de correr. Ahora que todos corremos
cada uno encontrará sus propias respuestas, quizás algunas preguntas, a los
porqués. Me identifico absolutamente con el concepto de correr de Murakami. Una
forma de vida, en definitiva, que nos permite afrontar otras facetas de la vida
como si también fueran carreras, entrenamientos. Paradójicamente nos explica
cómo nunca animaría a nadie para que comenzara a correr y escribe un panfleto,
en el sentido más positivo del término, que exhorta a correr a cualquiera que
lo lea. A esa anónima persona que existe en algún recóndito lugar y que aún no
corre.
¡Saludos!
2 comentaris:
Yo también soy un fanático del Tour. Lo tengo ya unido al verano y a las tardes de sofá con mi padre. Ahora comienzan a aparecer dopings de Jalabert, Olano, Durand, Cipollini.....Toca los cojones, quizá ya se rebusca demasiado no??
El libro de Murakami me encantó. Como todos los que escribe, vamos. Peio
Desde Arroyo en el 83 que habré seguido casi todos los Tours. Somos unos afortunados por ello. Y los recuerdos con tu padre...patrimonio emocional forever.
Abrazo!
Publica un comentari a l'entrada