A la salida se viene con las Vaporfly y la sonrisa puestas |
A mis casi 53
años no es que me queden pocos cartuchos, sino que es un puto milagro que aún tenga
alguno con posibilidades de ser dinamitado. Y el domingo lo dilapidé como si fuera
el puto CEO de una puta franquicia de tiendas de pirotecnia.
Tras 24 horas fustigándome,
enterrado el cilicio, he entendido cómo he podido correr de forma tan lamentable
a pesar de llevar 41 años corriendo y 31 años después de mi debut en maratón.
Lástima, David |
Comenzaré por el
final: llegué 4º a 20” del podio con 2h42’. Objetivamente nada que discutir. Un
tiempo decente a una edad provecta en un maratón de provincias. Pero rascando
un poco he encontrado las razones de mi penar atlético, que ya empezó a media
carrera, instalándose con fuerza en mi cerebro hasta ahora, que mientras
escribo lo voy exorcizando.
Algunas variables
eran incontrolables, sí, pero asumo toda la responsabilidad de mi fracaso por
mis miedos y mi ego, gigantes enemigos de la humanidad.
Podría escribir
que al saber que vendría David Posada, antiguo atleta internacional gallego, lo
consideré el claro favorito y me convertí en su sombra…hasta que se quedó en km
diez porque había estado enfermo toda la semana.
Foto de belleza arquitectónica |
Podría culpar al
voluntarioso atleta que se ofreció a hacernos de liebre 15’ antes de la salida
y a quien le compré el relato de inmediato. Nos llevó ligeramente más lentos de
lo previsto y se extenuó tras una docena de kms (gripe también). Racionalizándolo
no hizo mal su voluntarioso apoyo, fui yo quien al preguntarme mi objetivo lo
ralenticé tirando de falsa modestia y se solaparon las expectativas de ritmos con
los públicamente enlentecidos. El Garmin se había ido al palco así que no tenía
ni idea del ritmo que llevábamos… ¿qué podía salir mal?
Junto a un joven fixer |
Y qué decir de los
dorsales de 30k y los nuestros, la luminosidad del Mediterráneo nos confundía
en un azuloscurocasinegro que me hizo pensar antes de la media que iba segundo
muy cerca del primero cuando en realidad era sexto o séptimo…
Saliendo del Faro de Alto Rendimiento |
Pero no, la culpa
fue mía. Tras haber entrenado como nunca, sin problemas graves y tras el
exitoso finde anterior me vine arriba. Durante la semana fui consciente del
peligroso exceso de confianza en el que me iba sumergiendo. Y aunque intenté escabullirme
no lo conseguí. En mi cerebro, o ganaba David o ganaba yo. No contemplaba
ninguna opción más. Semejante falta de humildad merece el castigo recibido: lo
que sentí cuando me di cuenta que tenía a media docena de atletas por delante y
que ya no tenía tiempo de atraparles.
No ayudó tampoco
el modo pánico en el que entré el sábado al mediodía al ver que estábamos a 25
grados y que predecían un domingo peor. Tras Palma 2017, de 20 a 30 grados y un
Berlín 2018 de 20 a 23 grados (los 33 de Boston 2012 fueron una rave en los
Monegros) entendí que la combinación de maratón, calor y mi cuerpo es como la
democracia y la fiscalía española. Agua y aceite.
A meta que no les pillas |
A los pocos kms ya
sentía que no íbamos muy rápidos, el miedo al calor me decía que si eso ya más
adelante voy viendo y tal. Ese calor del que usted me habla. Y vaya que si lo
vi. 32 kms corriendo en solitario, de los cuales 20 persiguiendo a unos atletas
a quienes prácticamente consideraba culpables de usurpar mi podio. Una cosa es
salir conservador y otra relajarse.
42 kms a 3’51”
cuando en entrenos había llegado a correr 34 a ese ritmo…es el síntoma y prueba
de un fracaso sin paliativos. Tampoco voy a ir más allá de este escrito en lo
que se refiere a masacrarme. Entendido y digerido, extiendo acta para futuros
intentos.
Que se casquen 100 kms para verte, solo los necios confunden valor con precio |
Quin desastre!
Una más; mi 7ª en TGN |
2 comentaris:
jaja Ferran,
Las crónicas con una cantidad suficiente (o exagerada) de autofustigación son siempre las mejores!!
Reconozco que yo también padecí el exceso de confianza... en ti... que estabas que te salías últimamente. Un 2h37 no era nada descabellado, aunque el calor extremo era claramente un handicap.
De todas maneras, viéndote cabizbajo, solo, y aparentemente muy retrasado respecto a los líderes, pensaba que estabas teniendo un muy mal día... Pero era un espejismo, porque viendo tus dos parciales fuiste el único que pudo doblar en este circuito tan duro. Lástima de los 20" que a ti te habrían sabido a poco, pero que al menos te habría devuelto una pequeña parte de los kilómetros invertidos..
El mes que viene 53 años... un privilegio poder correr como tu!!
No deja de ser un gran resultado, que en pocas semanas verás con otra luz.
Y ya sabes... en una maratón un poco más multitudinaria reventarás el récord catalán... no tengo ninguna duda!!
Gracias por el libre campión!!
Dennis,
Me n'alegro d'haver-te pogut parlar ni que fos una petita estona. Per cert, la cuinera del Rincón de Zamora surt a Maestros de la Costura!!
M'he tret un pes de sobre després d'entendre bé que m'havia passat. Des de la mitja marató que estava en schock!
Ara a recuperar i a seguir amb els següents objectius, que tant per tu com per mi són prou exigents.
Abraçada,
Ferran
PD: ja tinc ganes de comentar amb tu el llibre
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