Grupeta chula |
La semana pasada
el temporal Gloria arrasó nuestro campo base, el Far, un rompeolas de 4’5 kms
con hitos exactos cada 250m en el que corremos miles de quilómetros a lo largo
del año rodeados de Mediterráneo. Nuestra península artificial y punto de
encuentro a primera hora los sábados y/o domingos. La parada del autobús de las
8h30.
La hermandad
Kalenji le rendimos un merecido homenaje, mientras se restañan sus heridas, en
el campeonato de Catalunya de 10k en ruta donde obtuvimos 6 medallas, 3 de oro
(M40-45-50), 2 de plata (M40-M50) y una de bronce (M40).
Aquí ya me dije que hoy sí |
Lo resalto también
para valorar el éxito en todos los sentidos de nuestro Kaptagat particular. Ya
sea en pistas martes y jueves o los fines de semana en nuestro Faro de Alto
Rendimiento el trabajo en equipo es lo que nos lleva a otro nivel de superación.
Creemos firmemente en el Dios Eliud y su mantra: “el 100% de cada individuo no
alcanza ni al 1% de todo el equipo”.
El eje
Far-pistas-Paraíso/Lucena marca sin duda alguna nuestras temporadas, siempre
míticas.
Duelo tarraconense |
En el plano más
particular, el fin de semana ha sido tremendo y atléticamente muy divertido a
la par que enriquecedor. En un tapering inusual, el sábado quise correr un 3000
al aire libre porqué se celebran muy pocos y pensaba que tenía el récord de
Catalunya M50 (9’33”) a mi alcance. La mañana del sábado, horas antes de
correr, descubrí que el gran Sancho Ayala, Capo y grande de la Franja, lo había
rebajado a 9’23” el pasado junio. Sin creerme capaz de ir tan rápido, con mi
colega Sergei ejerciendo de liebre me gusté corriendo en 9’28”15 con unos
parciales sorprendentes de 3’12”-3’7”-3’7”- que dispararon mis expectativas.
Sabía que estaba fuerte y rápido y que había entrenado muy bien pero habiendo
corrido el mil más rápido de la temporada en 3’22” no lo veía alcanzable. Y por
eso no lo batí, porque no me lo creí. Los 5” de diferencia los perdí en los
primeros 600 metros. Pero el balance es estratosféricamente favorable, aún así.
Por lo pronto cambió mi estrategia de carrera para el día siguiente en los 10k
de ruta máster en Vilafranca del Penedès. Y además sirvió para revisar
protocolos de calentamiento, corregir posturas atléticas y encontrarnos la
hermandad ATE (Atletisme Terres de l’Ebre). Un win-win en toda regla.
Elogio del quadríceps |
Tras un sábado
tarde de cine, relajación y descanso que ni José Manuel Parada y su pianista,
el domingo nos fuimos a Vilafranca con objetivos renovados. En mi caso me decidí
a correr más agresivamente e ir con un grupo que ronda los 33’ y medio.
Un "Eso es todo amigos" entre amigos |
Activado, salí
dispuesto a intentar no descolgarme. Tras conseguirlo y estabilizarme me animé
incluso a tirar en ocasiones de una grupeta muy chula de media docena de atletas.
La sensación era de ir rápido, muy rápido, pero nunca lo agonizante que suele
ser habitual a estos ritmos. Pasamos el 5k en 16’48” (mi mejor marca desde el
2015) y tras seguir intercambiándonos el liderazgo del grupo, en el último km se
estiró un poco pero entramos bastante juntos. En mi caso con una marca de 33’50”
(2º parcial de 17’2”) que me da mucho oxígeno para el maratón de este próximo
fin de semana y sobre todo con dos marcas, el 3.000 y el 10k, que me impulsan a
seguir dándole tralla a los entrenamientos -con cabeza, mucha cabeza- para los
próximos objetivos a corto (febrero/marzo) y a largo (julio).
¡Saludos!
1 comentari:
Impressionant, Ferran!!
No sé si físicament és lo millor a una setmana de la marató, però segur que t'haurà donat un 'subidón' de la hòstia.
Però... tu ja havies baixat dels 34', oi?
Bé, molta sort demà passat!
No estic molt animat per mi, però m'has animat tu i tinc ganes de veure't córrer el diumenge!!
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