I survived to Behòvia 2009

dimarts, 15 de novembre del 2011

A vintage race.

Rafa Iglesias, ganador en el 2009
Subtítulo (ya utilizado): Si me queréis, ¡inscribirse! 

Si os hablo de una carrera legendaria, tradicional, con miles de personas participando (y de un elevado nivel) y muchas más animando a lo largo del recorrido, con un circuito ondulado, con la meta situada en el centro de una bonita ciudad (cuya sola visita ya merece el viaje), con una organización excelsa que tras aplicar la teoría de colas por el Basque Institute of Mathematics (es que me impresionó el dato) mejora aun más, si cabe, la necesaria logística de un evento de tal categoría pensaréis que ya está el pesado de Ferran y sus batallitas de Boston. Pues no, os hablo de la Behobia-San Sebastián.

Curiosamente, mi idilio con estar prueba comenzó estando lesionado. Acudí de acompañante en las ediciones del 2002 al 2004. Y puse a Dios por testigo que caso de poder volver a correr, allí estaría. Tras retomar el ritual de los imperdibles el uno de marzo del 2009, en noviembre estaba en la salida.  Fue la edición que más cerca ha estado de suspenderse debido al mal tiempo (de hecho la foto que acompaña este blog es de aquel momento); tuvimos granizo, viento huracanado (la célebre foto de Rafa Iglesias apareciendo en meta tras una cortina de lluvia) y, a pesar de todo, allí estaban los miles de espectadores animándonos. Creía haber conocido el cielo.
Una falta el 2010 por coincidencia con la maratón que organiza mi club y ya mis llantos internos pedían a gritos otra vez más.
 
¡48.000 piernas!
 
Y así fue, el domingo, en un fin de semana de bañadores y La Concha, a las 11 de la mañana, salíamos la sectorial de quemados del running en avanzadilla del resto de corredores. Minutos antes, hablando con mi amigo Albert, le explicaba la suerte que tenía por vivir por vez primera la experiencia de la Behobia. Ni imaginaba lo que iba a vivir.
Salida levemente boxeadora y uno procura no excederse con el ritmo que para sufrimiento ya tuve bastante dos años atrás. Vigilo a mis compis de apuesta (el último de los 3 pagaba un desayuno) y adecuadamente progreso a un ritmo algo superior a los 3’30”. Pasando por el primer pueblo ya me impresiona la cantidad de gente que está en la calle animando. Como siempre, en el País Vasco, es fácil ver a tres generaciones juntas compartiendo afición: ya sea una carrera, ya sea un txiquiteo. La nota de color es el calor. Tremendo. Apuesto por ir bebiendo en cada avituallamiento y lloverme, será por aquello de la tradición, con agua en la cabeza para bajar la temperatura.

Memorizando perfil...

La primera subida fuerte (personalmente la encuentro más dura que la segunda y última), por una autovía perdida y solitaria, está inundada de aficionados que te animan hasta (su) extenuación. ¿De dónde han salido? ¿Cómo han venido? ¿Es real?.  Posterior llaneamiento –por así decirlo- y me instalo en una grupeta que me lleva “al gancho” pero en la que resisto con dignidad –más vale morir anaeróbico, que vivir trotando-. Cruzamos diversos pueblos y aquí la sensación, el recuerdo que me queda, es de un ruido atronador (Guipuzkoa wins Massachussets), una compacta masa humana aficionándonos, un espectáculo (no éramos nosotros, eran ellos) de un pueblo que ama el deporte, que en consecuencia, se ama a sí mismo. Sigo bebiendo y regándome (ahora me acuerdo de Carmen Maura en la Ley del deseo: ¡mójeme!) y llegamos prietos y firmes al Alto de Miracruz, mi cima favorita. Dicen que mide un quilómetro pero sabiendo que cuando llegues arriba solo queda bajada y más bajada pasa volando.  Y sin parar encaramos las avenidas finales en un glorioso sueño que fue verdad.
El año que viene más y, además, espero que con el Chilla-Leku abierto. Lo echo de menos.

¡Salud@s!

Post data en modo viva la numerasión (como cantaba el otro Jose Luís Rodríguez, el Puma): 116 de la general, 30 Vet1 –cuántos cuarentones y la Seguridad Social sigue sin hacernos un monumento-, 1h12’38” y no pagaré el desayuno, pero porqué mi co-míster tenía los isquios cargados, así que quizás vayamos a escote, que semos catalanes.


11 comentaris:

Ana ha dit...

¡Gran crónica!¡Felicitats mestre!

Pau ha dit...

Quin nivell si un veterà es casca 1.12 i és el 30è.
Felicitats Ferran, sort a Tarragona!

XeviX ha dit...

Ferran, crack per saber degustar cadascun dels moments d'aquesta gran cursa, crack per la teva cursa i temps final, i crack per regalar-nos aquesta crònica.

Salut i quilòmetres, company!

Franfri Aguilera ha dit...

Ferran, si no fuera porque soy de letras, ahora mismo me empaparía la teoría de colas esa, pero me puedo hacer una idea.

Me pilla a tomarpor el ojallo, pero algún día habrá que disfrutar gracias a la afición vasca, que es especial, sin lugar dudas.

Aquí no te anima ni el tato, vamos.

Genial entrada.

Un abrazo

Dioni Tulipán ha dit...

¿Qué quieres que te diga que no se ha escrito ya?

Impresionante crónica, igual que el crono... pero me he quedado ya sin superlativos.

Y una vergüenza que Rafa Iglesias no ha podido participar (por mucho que lo justificaba el comentarista tan pesadamente en la maratón de NY), por tanto mi sorpresa que Leiva sí podía salir y casi triunfar.

El año que viene no quiero fallar yo tampoco !!!

joan ha dit...

Ferran, enhorabona, per la crònica però sobretot per la cursa; vaig veure la teva gorra fins coronar el primer i llaaaarg port. Jo vaig patir( de calor) més que disfrutar. Ja no et vaig tornar a veure.
Així doncs, felicitats per tot plegat, i a seguir així, espero poder ser rival teu de nou... algun cop.

Albert Tatjé ha dit...

És un plaer llegir les teves cròniques, amb apunts de literatura, de cinema, de música, d'història, etc.

Ferran ha dit...

Joerr...había escrito un comentario para cada uno y se ha perdido...

Ana, el año que viene más y mejor!

Gràcies Pau, vindràs a Tarragona? Estarà animat lo tema.

Xevi, tant de crack a veure si faré catacrack! ;) Agreixo el teu encoratjament i a veure quan coincidim. Alpens a l'horitzó.

Franfri, yo soy mixto. Ni chicha, ni limoná. Pero vaya, se notaba algún cambio a mejor que ya es decir. Súbete el año que viene sin falta que es muy grande.

Dennis, cómo tienes la rodilla XD! El año que viene caravana de runneres a Donostia!

Joan, ja et vaig veure però tampoc tenia massa alè per poder parlar. Ens anirem trobant per aquestes curses i a veure si en marató puc anar una mica més lent que tu i baixar de 2h40' que seria un dels objectius d'aquesta temporada.

Albert, brutal, oi? I amb la senyera...

C.A.Francoli ha dit...
L'autor ha eliminat aquest comentari.
C.A.Francoli ha dit...

Impresionante Behobia!! Pese a lo dificil que es correr entre tanta gente, el ambiente es impresionante. Me lo habian explicado, pero hay que vivirlo. La nota negativa: un poco de inconsciencia en mucha gente (según he leido 400 visitas a urgencias y mucho tirado en la cuneta).
Felicidades por el marcón. En TGN te sales.

Ferran ha dit...

Gracias Francolí! Impresionante. Había estado pero con lluvia y el domingo se salieron (a la calle!).

Tarragona este año será la media de más nivel de Catalunya, Granollers aparte que juegan la Champions. 4/5 atletas de 1h5', más de 20 sub 1h13'...será muy chulo verla al correr mientras nos vamos cruzando.

Un fuerte abrazo!