Que me lo haya pasado tan bien corriendo el maratón de Boston –no deja de rondarme la cabeza cuando volveré…sólo pienso en Boston, o casi- no quita óbice para realizar un análisis del porqué, a pesar de estar en un gran estado de forma como comprobé en Valls tres semanas antes, me di de bruces contra el muro. Y creo haber encontrado, claramente, el motivo. De hecho, hay una categoría y dos anécdotas al respecto. Y comenzaré por estas últimas.
Que no significa que me vaya al Oktober fest a levantar jarras y jurar amistad eterna con algún, o alguna bávara, sino que no contemplé un pequeño detalle. Cuando un Pro comentó en facebook que había realizado 25k sobre el tapiz rodante no pude más que preguntarle el porqué. Y me dijo que debía entrenarse en el arte de la hidratación a ritmos altos más la ventaja de poder corregir su postura corriendo frente al espejo. Así pues me puse con ello y en las tiradas largas –no en la máquina, claro- me llevé el botellín y cada 4k iba bebiendo. Y parecerá una tontería pero en Boston nos dieron el Gatorade y el agua…en vasos. Y bebí mal. Y tuve calambres en el estómago desde muy pronto, además de echarme parte de la misma por encima, lo que a 3/4 grados no es muy agradable. Lo solucioné disminuyendo la velocidad en los avituallamientos. Pero ahí hay una mejora potencial.
No te emociones Ferran.
![]() |
Aun levantaba rodillas... |
Descarga de hidratos.
El error monumental. La sensación en el 25k fue de un vacío total. Depleted. No me quedaba ni un gramo de fuerza. Llegué más fino que nunca en mi vida. En modo MadrePreocupadaPorquéSuHijoNoLeCome, o lo que viene siendo, ¿Qué delgado estás, no estarás enfermo?, por parte de saludados, conocidos e incluso amigos. Repasando la dieta me doy de cabeza contra un menhir por no haber sido más riguroso.
Viernes. Desayuno poco para mis estándares. Comida, es un decir, en el avión, aunque me comiera hasta los tenedores de plástico y Cena en Boston, bistec con verduras.
Sábado. Desayuno megachic en Boston a las once y como a las seis teníamos cena, pues ya no como…y en la Cena, sopa y langosta. Dejándome esta última al saturarme de pinzas y crustáceo por ser poco hábil con las manos…
Domingo. Desayuno un bagel, poquísimo para mis ídems. Como unos bisteles fritos y cena con pasta…demasiado tarde, el daño estaba hecho.
Lunes. Desayuno un english muffin con mermelada y por la emoción no me entra nada más…mazo’s man don’t forgive.
Lo cual significa que a partir de ahora vigilaré mucho más lo que como porqué aun tengo muchísimas ganas de entrenar, y si puedo, un poco más. Es decir, me voy a currar la cocina.
![]() |
Casi muerto, pero llego. |
Los años 85 y 86 –debo un post sobre ello- cuando entrenaba y competía en 3000 obstáculos y los 5000 (19 años), compartiendo pista en Barcelona con Abascal, Moracho, Carlos Sala y Roberto Cabrejas, entre otros, me acuerdo de ver las palizas del primero rodando sub 3’, dando vueltas y más vueltas a la pista con Don Gregorio Rojo a pie de calle, crono en mano. Y oírle decir que llegaba tan cansado a casa que no podía ni cenar. Algo así me ha pasado este año, así que a enmendarse tocan. Iré colgando las recetas a medida que me vayan saliendo bien. Y sin Thermomix!.
Saludos!
PD1: leyendo ayer el tocho biblia de programa oficial compruebo que si me inscribo para Boston 2012 en septiembre tengo plaza fija. Mmmmmm…un viaje en modo monje, creo que valdría mucho la pena. Próximamente escanearé las fechas y mínimas de inscripción porqué aunque ya lo escribí, lo han puesto muy intuitivo.
PD2: adjunto fotos de Boston. Supongo que fotografiar a 26.000 personas no es tarea fácil, pero me gustan más las que hacen mis amigos de Kufuuza.
PD3: Os dejo un vídeo de la victoria de Bill Rodgers en 1979.