I survived to Behòvia 2009

dilluns, 18 de juny del 2012

Lehman Sisters.

¡Motherfuckers!
Corre una leyenda urbana, potencial certeza, de que Lehman Sisters nunca habría hecho default, palabro que tanto se usa ahora. La toma de decisiones, la visión del mundo desde una óptica femenina en definitiva, no es igual sino sensiblemente mejor en aras del bien común. Y aunque hayan sido unos fulanos, cínicos cabrones, cocainómanos puteros (Inside job), sensiblemente insensibles, lloricas a deshoras (generalmente tras eyacular a los 10”, si con suerte ha habido erección y en los 59’ que les quedan por la compañía de pago) y egocéntricos equivocados quienes han protagonizado la primera parte de esta gran recesión, de esta gran estafa que las clases medias de occidente estamos sufriendo (cura de humildad, también) en manos de los señores (neo)feudales del capital y de una clase política con unos niveles de mediocridad difícilmente superables (¿otros vendrán?), no me estoy refiriendo exclusivamente a un género sino más bien a una actitud con algo de hormonal, algo de genética y un resto de (no) principios que lo traspasa, aunque mayoritariamente sea masculino.

Oro y plata y ya se las ve: muertas
En eso pensaba cuando un artículo de la revista Running Times (excelente revista y mejor web) me sorprendía desvelándome una historia contada por hombres y que tenía por cierta y evidente. Si sois un poco aficionados al atletismo y a los JJOO os sonará la historia. Tras incluir a las mujeres en el atletismo (debido a la gran presión ejercida sobre el Comité Olímpico Internacional por el importante movimiento feminista de los años 20, que llegó a crear unos Women’s Olympic Games), se definieron los 800 metros como la prueba más larga que podían disputar. Contaron las crónicas que la carrera fue una auténtica tortura, retirándose 6 de las participantes y colapsándose otras 5 tras cruzar poco menos que muertas, la meta. Grave consecuencia de tal esfuerzo fue la pérdida de su capacidad reproductiva así como de su identidad sexual, ahí es nada. Como resultado, 32 años sin distancia superior a los 400 metros. Hasta 1960 no se volvieron a disputar las dos vueltas a la pista. Pero la verdad fue otra y la carga de la prueba irrefutable: su visionado más la lectura entre líneas de las crónicas de la prueba. No fueron once sino nueve las finalistas, quienes el día anterior se habían clasificado en unas semifinales que dejaron atrás a 16 corredoras. No hubo colapso alguno, a pesar de ser un día caluroso sino al contrario. Las 3 primeras batieron el anterior récord mundial y sí, una atleta se cayó tras un agónico sprint como tantas veces ha pasado y pasará. Las imágenes tras meta os pueden recordar a cualquiera de vosotros: cuerpo doblado, manos en los cuádriceps, mirada perdida. Por suerte todo quedó atrás, llegando la maratón, la pértiga y los obstáculos. 

Ken Souza, sucumbió a la laca.
Solo nos queda la natación sincronizada masculina por qué a Ken Souza, ya lo tuvimos. 

Personalmente, tras el Campeonato de Catalunya tocaba seguir manejando con la máxima gracia posible dosis de carga y dosis de regeneración. Y ya a 11 días del de España, aumentar los ritmos, perder los miedos y recuperar más. Así cayeron martes con cuestas de 500m, miércoles con 2 x 5 x 400m a 1’12” de promedio y un gran viernes, lujosamente ayudado por mi compañero Sergi Hidalgo, que me llevó a hacer 5 miles entre 3’3” y 3’10”. Lo cerré el domingo con un rodaje progresivo en el que por momentos me sumergí en Eldoret y me vi rodeado de keniatas, un poco blancos eso sí, pero fibrados y resistentes como los que más. Joder que bien me lo paso en el camino.

¡Saludos!





dimarts, 12 de juny del 2012

Objetivos y realidades.

Tapando a Nuestro Señor del Asfalto: Fabián Roncero!
Aunque la temporada 2011-2012 me haya traído muchas más alegrías de las imaginadas, All Blacks, sí que es verdad que en cada entrenamiento me han acompañado los recuerdos de dos carreras que el año pasado fueron muy significativas para mí. Las dos eran en pista y en la misma distancia, mi prueba fetiche, los 5.000. Esas sensaciones vividas, eran (y son) el motor de mis entrenamientos, junto al placer que me produce correr, of course.
Cronológicamente, la primera era el Campeonato de Catalunya de Veteranos, donde fui cuarto el año pasado en mi primera incursión sobre el tartán, en años. Y la siguiente el Campeonato de España over 35, donde el año pasado viví una experiencia casi mística en forma de ataque, en vivo y en directo, de Don Fabián Roncero, con quien compartí prueba y a quien desde que le descubrí en Atenas en el mundial de 1997 siempre he adorado. Ya sabéis, a mí lo que me gusta, es ser fan.
Ayer el primero de mis objetivos se convirtió en realidad. En una edición de menor nivel que la del año pasado y en un día en el que no me encontraba, ni anímica ni físicamente (consecuencia de lo anterior) pletórico (aunque si me sabía muy en forma), en una carrera en la que me quedé en solitario a falta de 6 vueltas, conseguí el oro batallando más con los cincuentones que con los de mi grupo de edad. 

Águilas 2011: liderando Albert Pascual a quien ví muy bien el domingo

Y en 3 semanas, lucharé y daré lo máximo por intentar subir al pódium del Campeonato de España en Águilas. La motivación es tal que incluso creo que voy a correr con clavos. Serán mis clavos de Cristo. Mi semana de pasión.
Y pase lo que pase, estaré satisfecho. Cumplir una meta, incluso si esta es muy alta, es la guinda del pastel pero lo relevante, a lo que hay que estar atento para disfrutarlo, es al camino. Ahí está la clave.


Tras la media de Cangas, descansé totalmente 48h y tras una progresión de quilómetros muy suave el jueves ya hice 3 series de cuestas de 500m y el viernes 10 x 400, recuperando 45” a 1’14”4 de promedio. Sumé 75k. Y la siguiente, comencé a añadir calidad aumentando la recuperación, añadiendo un día de 5x 1k, en día de viento pestoso, entre 3’10” y 3’14”, recuperando 2’45”; dos días después, 8x 400m, recuperando 1’45”, a 1’12” de promedio haciendo una última serie en 1’9”, lo cual me dio mucha confianza. Los dos días antes del 5.000, un mini tapering en forma de 6k cada día.
¡Saludos!